En los últimos años, el interés por la inteligencia artificial (IA) ha crecido sustancialmente. La disponibilidad de grandes volúmenes de datos, los adelantos en la capacidad de cálculo y la invención de nuevos métodos y algoritmos han hecho posible entrenar modelos más precisos y fiables que pueden aplicarse con éxito en contextos reales. Este interés creciente se ha disparado todavía más con la aparición de nuevos métodos de IA generativa (IAG), capaces de sintetizar texto, imágenes, vídeo, audio o código a partir de las indicaciones de los usuarios. La popularidad de la IAG, junto con la aparición de nuevas versiones cada vez más sofisticadas que requieren más recursos para su creación y ejecución, ha abierto el debate sobre su escalabilidad a largo plazo. En este artículo analizaremos la IAG desde el punto de vista de la sostenibilidad, considerando el impacto actual y las previsiones de futuro, identificando las tendencias y tecnologías más prometedoras para hacer la IAG más sostenible a largo plazo.